Osteoporosis ¿Quién puede padecerla? Todo el Mundo
Estrucutra ósea y formación de la enfermedad
El hueso es un tejido vivo que se encuentra en constante renovación. Por un lado, se descompne y se destruye el hueso envejecido (reabsorción ósea), y al mismo tiempo se reemplaza formando el hueso nuevo (formación ósea).
La osteoporosis aparece cuando el equilibrio entre ambas se rompe, lo que causa que la generación de hueso nuevo sea más lenta que la pérdida de hueso viejo. Los huesos se vuelven más porosos, ya que aumenta el número y la amplitud de celdillas (tejido esponjoso) que hay en su interior. Esto provoca que estén más delgados y frágiles, por lo que no resistirán a los traumatismos y se fracturarán con facilidad.
Sítomas
La osteoporosis no produce síntomas notables que puedan deducir la aparición de la enfermedad para poder paliarla en cuanto aparezca, no duele ni causa ninguna alteración. Sin embargo, aparecen con gran frecuencia fracturas óseas, que son las que condicionan la vida de los afectados.
Las fracturas más frecuentes en la osteoporosis de la mujer postmenopáusica son las vertebrales, que producen dolores muy agudos en la espalda y condicionan la aparición progresiva de deformidades de la misma. Este dolor puede dar paso a uno más continuo, producido por microfracturas, y que muchas veces es el sítoma que lleva al diagnóstico.
La osteoporosis del anciano produce típicamente fracturas en los huesos largos, sobre todo en la muñeca o en el fémur, siendo la responsable de las típicas fracturas de cadera.
Causas de la enfermedad
Sólo en un pequeño porcentaje de casos se conocen las causas de la osteoporosis. Son las osteoporosis secundarias, en las que aparece como consecuencia de otra enfermedad, como las enfermedades reumáticas (aparato locomotor), endocrinológicas (glándulas) o hematológicas (sangre).
Sin embargo, la gran mayoría de afectados tienen una osteoporosis primaria, en las que se distinguen tres grandes grupos:
- La osteoporosis idiopática juvenil o del adulto, sin causa conocida.
- La osteoporosis tipo I o postmenopáusica, en la que influye decisivamente la carencia de estrógenos que se produce en la mujer en ese periodo de su vida.
- La osteoporosis tipo II o senil, que es la producida por el envejecimiento.
Existen también muchos factores que aumentan la pérdida de la masa ósea y multiplican el riesgo de padecer esta enfermedad. Entre ellos cabe destacar el sedentarismo, el tabaco y el alcohol.
Pero... ¿A quién puede afectar?
Es una enfermedad que puede afectar a cualquier persona: hombres y mujeres de todas las razas.
Con el paso de los años todas las personas van perdiendo masa ósea, por lo que es especialmente frecuente a partir de los 70 años.
Las mujeres, especialmente portmenopáusicas, son las que corren mayor riesgo.
Cómo prevenirla y tratarla
Como medidas generales se recomienda una dieta saludable y rica en calcio, los ejercicios con peso moderado, y la abstención o eliminación del tabaco y alcohol.
Cuando la dieta no garantiza una cantidad adecuada de calcio, deben administrarse suplementos. En muchas ocasiones se asocia la administración de vitamina D porque facilita la absorción del calcio.
Como tratamiento y prevención se utilizan fármacos que disminuyen la decomposición del hueso viejo. Los estrógenos de utilizan en la osteoporosis postmenopáusica.
